Beedata apoya a las comunidades energéticas industriales
La actual crisis energética y medioambiental hace aún más evidente la necesidad de desarrollar las energías renovables, siempre garantizando estabilidad en la red y suministro de energía. La estabilidad en los sistemas de renovables es fundamental para poder ser una alternativa real que favorezca su implantación. Este reto es solo alcanzable con el compromiso de todas las partes interesadas, incluyendo sobretodo a los y las consumidoras de energía.
La concienciación, el compromiso de todos los actores (la administración, las empresas y la ciudadanía) es cada vez más alta, entendiendo que su participación en el proceso de transición energética es fundamental y central. Esta centralidad e importancia se da en los consumos compartidos y en concreto en su forma de comunidades energéticas (CE), que se encuentran en un momento de eclosión en España. En definitiva una nueva forma colectiva de creación, participación y gestión de la energía que ha venido para quedarse.
En este post nos centramos en las comunidades energéticas industriales, donde desde Beedata, hemos puesto conocimientos y experiencia al servicio de estos proyectos comunitarios, permitiendo un acceso fácil y justo de los ciudadanos y empresas a recursos locales de energía renovable y sus beneficios en el ámbito social.
Desde 2021 nos encontramos desarrollando herramientas para abordar uno de los grandes retos: hacer fácil la complejidad de estos nuevos sistemas que pasan por la digitalización y simplificación de los procesos de creación, participación y gestión. Todo y ser una herramienta híbrida, hoy nos centraremos en el ámbito industrial y en una segunda entrega hablaremos de las ciudadanas.
Insiga II, el proyecto que apoya y dinamiza la creación de comunidades energéticas industriales
En 2021, junto con Inergy, ARCbcn y Navarra de Suelo y Vivienda y AIN, desarrollamos el proyecto Insiga II.
El objetivo de este proyecto es el de desarrollar una aplicación de software inteligente que facilite y dinamice la creación de comunidades energéticas mediante proyectos de autoconsumo fotovoltaico compartido y estudiar la viabilidad técnico-económica de una comunidad energética en polígonos industriales. A través de la herramienta se permite agrupar a empresas en el marco de polígonos industriales con autoconsumo colectivo facilitando la digitalización y el acceso a las oportunidades en el momento actual de transición energética y transformación hacia la industria 4.0. descarbonizada y más competitiva.
Beedata se encargó de diseñar dos algoritmos de inteligencia artificial (algoritmos genéticos), de cálculo y optimización de coeficientes horarios, para que se pueda definir el número y tipo de participantes según los mejores perfiles y la mejor repartición posible, que garantice la menor
Los otros participantes del proyecto son Inergy, que se encargó de desarrollar el software de simulación de generación y de cálculo económico-financieros, a partir de su módulo SIE de autoconsumo, la ingeniería y consultora Armengol & Ros Consultors Associats (ARCbcn) encargada de la creación de un kit de recursos de apoyo a las comunidades energéticas y Navarra de Suelo y Vivienda (Nasuvinsa), entidad responsable del piloto y de la definición y validación de requerimientos.
Incomuner 4.0, la herramienta indispensable para las CE industriales
Otro proyecto en torno a las comunidades energéticas es Incommuner 4.0, desarrollado junto con AIN, Inergy y Nasuvinsa. En este proyecto queríamos desarrollar, como una continuación de Insiga II, una solución que permitiera una gestión integral de las comunidades energéticas en entornos de polígonos industriales y de proyectos mixtos (residencial-industrial). Es una aplicación beneficiosa para todas las partes implicadas en una comunidad, ya que permite:
- En el entorno de administración de la comunidad, se permite gestionar los aspectos económico-financieros y energéticos, así como el estado de la comunidad a diferentes niveles (energético, económico, técnico…)
- En el entorno de los participantes, garantiza una optimización de la instalación con un control de desvíos y fallos, y la asignación óptima de los coeficientes energéticos compartidos en función del consumo de cada participante, que tal como permite la ley se puede hacer cada 4 meses. También permite conocer la parte de energía asignada cada a día a cada miembro a través de
unala APP, que incluye consejos de cuando usar los diferentes consumos, según las horas de generación y los precios. - En lo referente a la gobernanza, permite calcular el impacto en cuotas, coeficientes de reparto, inversión, y rendimiento, las altas y bajas de participantes, así como posibles ampliaciones, o batería, cargadores de VE, etc.
- Y finalmente, en el entorno público, que dota de transparencia y automatización, facilitando el reporte de los resultados de generación, autoconsumo y reducciones de CO2 de cada comunidad, a la sociedad.
En este proyecto, Beedata participa como socio desarrollador de software. Dentro del entorno de los socios, ofrecemos a cada participante la aplicación Bee Advisor, nuestra web app que permite un acceso rápido a su perfil energético (diario, semanal y mensual) y a los consejos de cuando usar mejor la energía, aportando transparencia, control y gestión sobre su consumo y generación de energía . Complementamos la web-app con una plataforma de gestión energética para los gestores de la comunidad, para optimizar, cada hora, la asignación de los coeficientes energéticos compartidos en función del perfil energético de cada participante. Este trabajo permite asegurar el máximo de auto consumo energético y la mínima exportación a la red, incrementando la creación de ingresos producidos y conservados en la propia CE.
Esperamos seguir participando activamente en el desarrollo de las comunidades energéticas adaptando nuestras soluciones a los posibles retos y cambios de estos proyectos, para responder siempre a las necesidades de sus actores. Por ello hemos ganado otro proyecto que se inicia a principios de 2023, llamado Insiga III, que añade a las funcionalidades existentes, la posibilidad de gestión activa de la demanda, a través de baterías, y de otras cargas, como bombas de calor, o cargadores de VE y que soluciona la gestión de la flexibilidad que tienen las energías renovables y, en nuestro caso, las instalaciones fotovoltaicas.